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¡Hola lectores! La reseña de hoy es de El mar aéreo, del uruguayo Pablo Dobrinin, un libro que leí en colaboración con la Editorial Fin de Siglo.
Sinopsis: “La literatura uruguaya más reciente esconde un secreto. Hay que seguirlo en un rastro de revistas on-line, de algunas traducciones, de un libro publicado hace ya unos años a ambos lados del Río de la Plata, y cuando lo alcanzamos todo queda claro. Entendemos que hay un escritor llamado Pablo Dobrinin, que vive y produce en Uruguay, y escribe una fantasía y una ciencia ficción únicas en el mundo, tan singulares como a tono con lo que ofrecen las mejores plumas del género en el siglo xxi, tan sorprendentes como conscientes de la tradición a sus espaldas. En una época de autoficción trivial, de novelistas de buenos modales que se van a lo seguro y a un realismo ya agotado, la literatura de Dobrinin es una inyección de vida y una apuesta por la maravilla. El mar aéreo, su segundo libro, es una muestra perfecta de su talento. En sus páginas conviven delicadas obras de arte alienígena con bosques que crecen por las noches, máquinas voladoras con poesía extraterrestre. En los mundos de Dobrinin la belleza es siempre inquietante y el terror siempre luminoso; la literatura misma se vuelve una fiesta en una galaxia lejana, extraña y familiar, a la que todos hemos sido invitados”.
Creo que pedí este libro a la editorial porque me llamaron la atención el título y la portada. Lo empecé a leer sin ninguna expectativa ya que solamente sabía que se trataba de un libro de cuentos y nada más, pero me llevé una grata sorpresa porque disfruté bastante de la lectura.
El mar aéreo está compuesto por seis cuentos fantásticos, así que voy a hablarles brevemente de cada uno para contarles qué me parecieron.
El primer cuento se llama El bosque que crece por las noches, y trata de un hombre solitario y tranquilo que conoce a una chica que es como un huracán, habla sin parar, tiene ocurrencias insólitas, va y viene cuando y como le da la gana. Poco a poco empieza a aumentar la tensión entre ellos hasta que desborda justo cuando están atrapados en un bosque insólito y misterioso. Definitivamente este fue mi relato favorito. Empecé sin entender mucho pero a las pocas páginas la historia ya me había atrapado y no pude dejar de leer hasta el final, que para mi fue excelente.
“Y así las ramas, que al principio se extendían gráciles, comenzaron a transformarse en armas puntiagudas que buscaban desgarrar los músculos, perforar la carne y esparcir las vísceras, hasta pintar un bosque rojo que abarcara el universo”
El segundo cuento se titula Algunas cosas que vi en el Desierto y si bien me resultó entretenido de leer, no me pareció la gran cosa. Trata de un hombre que está perdido en un desierto junto a otros personajes muy diferentes entre sí. Para escapar del desierto cada uno debe enfrentar un miedo o un desafío personal muy grande, y poco a poco el protagonista ve cómo sus compañeros enfrentan esos desafíos y los superan, o mueren. Sinceramente, no terminé de entender este relato, no me generó nada.
El tercero es La visión del paraíso, y trata sobre un anciano que lleva a cabo un elaborado y macabro plan para aumentar su sabiduría y ver algo que nunca nadie ha visto antes. Este cuento es muy peculiar, porque incorpora temas no muy frecuentes (a mi parecer) en la fantasía, como lo grotesco y lo bizarro. Fue un relato bastante largo y un poco complejo porque había muchas cosas que se explicaban recién hacia el final de la historia. Fue algo diferente y en general me gustó.
El cuarto relato se llama La sonrisa del ángel, y sigue la historia de un chico que se siente atraído hacia su prima (turbio) y se pone muy celoso cuando se entera de que ella está saliendo con otro muchacho. Así que se dispone a espiar a este chico, descubriendo un mundo totalmente delirante y peligroso, y viéndose obligado a arriesgar su vida para salvar a su prima. Este cuento me aburrió, no tengo otro adjetivo para agregarle. No me pareció la gran cosa, y tampoco me resultó entretenido.
Pablo Dobrinin
El quinto en la lista es el cuento que da nombre al libro, El mar aéreo. En este relato, el protagonista está cuidando la casa de un amigo mientras él está de viaje, y poco a poco empieza a percibir un fenómeno increíble que se produce en el techo del dormitorio. Este fue el que más me gustó después de El bosque que crece por las noches. Me pareció una historia original, que llama la atención y genera mucha intriga.
Por último tenemos Un jardín en Nueva Kybartai. Sinceramente, ya casi ni recuerdo de qué trataba, pero en general fue un cuento flojo, lento y aburrido.
Antes de cerrar la reseña me veo obligado a destacar algo que me molestó durante todo el libro. Si mal no recuerdo, en todos los relatos había alguna escena de sexo o donde se describía el cuerpo de alguna mujer, y el autor hizo un abuso del adjetivo “turgentes” para describir los senos de esos personajes. O sea, cada vez que se hablaba del cuerpo femenino, los senos eran “turgentes”. ¿No se le ocurrió otra palabra para describ
irlos? Sé que a lo mejor es un detalle menor, pero realmente me llamó la atención porque no es un adjetivo muy común, y verlo repetido tantas veces terminó siendo molesto.
En resumen, El mar aéreo es un libro de cuentos muy particular, que combina de forma acertada (a veces) la fantasía con temas no tan habituales en este género como el sexo, la violencia y lo grotesco. Se los recomiendo porque es literatura nacional y porque sé que a muchos les puede gustar este tipo de historias. Muchas gracias a la editorial por mi ejemplar 💚
